Luego de la difusión de una imagen incómoda, 30 días le bastarán a la senadora perredista para desvincularse del grupo michoacano de los Caballeros Templario.
El Senado aprobó darle 30 días de licencia a la senadora Iris Vianey Mendoza, quien pidió este plazo para ser investigada por las acusaciones en las que se le vincula con los Caballeros Templarios, esto tras una fotografía en la que aparecía junto a la hija de uno de los líderes de dicha organización criminal.
“He mandado un documento donde solicito una licencia de 30 días. No necesito el fuero constitucional porque no tengo ninguna relación con ningún grupo de la delincuencia organizada”.
Incluso la legisladora propuso que el propio Senado realice las investigaciones al respecto, con el fin de deslindar responsabilidades: “Los señalamientos en contra de mi persona son totalmente falsos, son una genuina amenaza en contra de mi persona y de mi familia. No podemos permitir que se instale la duda de que uno de los miembros del Senado pertenece a estos grupos”, señaló la perredista.
Por su parte, el líder del PRD, Jesús Zambrano, celebró la decisión de Mendoza y pidió que las investigaciones que se le harán a la senadora se extiendan a personajes como el ex vocero de las autodefensas en Michoacán, Juan Manuel Mireles, así como a los funcionarios del estado: el actual secretario general de Gobierno Jesús Reyna y el coordinador de los diputados panistas Luis Alberto Villarreal.
“Lo que yo esperaría es que todos los señalados y que hoy tienen responsabilidades públicas se separen provisionalmente de sus cargos y se pongan a disposición de las autoridades correspondientes a fin de facilitar el deslinde de responsabilidades”.
Luego de ser autorizada la licencia, la senadora perredista, acompañada por el coordinador del PRD en el Senado, Miguel Barbosa, y el presidente del PRI en el Senado, Raúl Cervantes, acudió presentar una denuncia de hechos ante la PGR, con el fin de aclarar los señalamientos formulados por Mireles, durante una entrevista con la periodista Carmen Aristegui, en la que acusó a Vianey Mendoza de tener vínculos estrechos con los Caballeros Templarios.
“Es una denuncia de hechos para que se investigue lo que es público y notorio que se difundió en la persona de la senadora (…) y en caso de que no hubiera ningún resultado delictivo, que se limpiara el nombre de la senadora, explicó Raúl Cervantes.