Las autoridades de Nueva Zelanda deportarán este miércoles a un ciudadano proveniente de Kiribati, quien pidió asilo debido a las afectaciones que para él representa el cambio climático.
El nombre del sujeto en cuestión es Ioane Teitiota, quien intentó ser reconocido como el primer “refugiado climático”. El alegato que presentó para extender su permanencia en Nueva Zelanda fue que las fuentes de agua de su país de origen están contaminadas por sal, esto debido a los avances del mar.
Kiribati, región compuesta por más de 30 islas de coral, junto con las Islas Marshall y Tuvalu, es uno de los países más afectados por el aumento del nivel de las aguas ocasionado por las alteraciones climáticas… claro, causadas por el calentamiento global.
Teitiona emigró junto con su mujer en 2007. En Nueva Zelanda nacieron sus tres hijos. Al expirar su visa de trabajo, el hombre de 39 años pidió a las autoridades le concedieran el estatuto de “refugiado climático”. El innovador recurso fue rechazado desde julio, pero el tema volvió a ser encendido ya que hoy se cumple el plazo para su deportación.
El juez de Teitiona, Michael Kidd, pidió la liberación de su cliente para que pudiera esperar el resultado de la apelación que se hizo por razones humanitarias. Además, preparará una denuncia que presentará al Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
Kidd también alegó que los hijos de Teitiona serían vulnerables a las enfermedades de Kiribati porque no habían desarrollado inmunidad a ellas y debido el suministro de agua de ese país ha sido contaminada. Parece que ningún recurso dio resultado, ya después criticó la postura del gobierno neozelandés: “este gobierno está permitiendo la entrada de 850 refugiados sirios y no se procupa por las condiciones de nuestra propia gente del Pacífico”.
Terri Thompson, abogado de Inmigración de Nueva Zelanda, comentó que ya se tenía preparado el vuelo para el regreso de Teitiona a su país. También se tiene planeada la deportación de su esposa e hijos.
*Vía dn.pt, m.nzherald.co.nz