Hace unas semanas, Cuba presumía que pasaba días sin reportar casos fatales por COVID-19. Lamentablemente la situación ha cambiado y, por ello, ha implementado medidas para contener una nueva ola de contagios. Donde más se aplicarán éstas es en la capital, La Habana.
De acuerdo con Granma, a partir del 1 de septiembre se comenzarán a implementar en La Habana una serie de medidas restrictivas, las cuales se extenderán por 15 días y tienen como objetivo contener el rebrote de la pandemia, detectado desde el 24 de julio.
Quizás la medida más drástica que tendrán que respetar los habitantes de La Habana es la restricción a la movilidad de personas y vehículos, la cual iniciará a las 7:00 pm y terminará a las 5:00 am del día siguiente… toque de queda, en pocas palabras.
Según el diario de Cuba, quienes no respeten el toque de queda, en el caso de vehículos, se les retirará la matrícula de circulación. En lo que respecta a peatones, el gobernador dio autorización de aplicar “multas severas”, dependiendo el grado de indisciplina.
La restricción a la movilidad aplicará tanto para habitantes de La Habana como para turistas… de hecho, las autoridades han establecido que queda prohibido el traslado interprovincial por motivos turísticos y vacacionales. “Las personas con reservaciones, recibirán el reintegro del dinero o la opción de cambiar la fecha de esta”, indica Granma.
Las medidas restrictivas también afectan a los centros de trabajo. Estos deberán cerrar o, mínimo, reducir el número de empleados. Por otra parte, se señala que debe limitarse la llegada a La Habana de personas de otros municipios que llegan para ejercer el comercio.
Impedir que en otras ciudades se replique situación de La Habana
Aunque las medidas restrictivas son apenas para La Habana, el Grupo Temporal de Trabajo del Gobierno para el control de la epidemia en Cuba pidió cerrar filas a todas las autoridades, para evitar que la situación que se vive en la capital se replique en otras entidades.
El viceprimer ministro, Roberto Morales, señaló que, aunque algunos territorios no reportan circulación del virus, toda persona que llegue a manos de un doctor debe ser tratado como paciente COVID-19… no importando que esté siendo tratado por otras enfermedades. Así, primero deberá ser descartada completamente la presencia de coronavirus y, luego entonces, atender otros posibles padecimientos.
Aunque se supone que lo anterior se aplica desde hace tiempo, el funcionario cubano lo recordó, debido a que se ha detectado que la relajación de la medida ha sido causa de nuevos contagios. En el último reporte, las autoridades de Cuba reportaron 47 nuevos casos de COVID-19, de los cuales 19 correspondieron a La Habana.
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