Cuando se dice que México cuenta con una buena generación de pilotos, no es mentira, pues Checo Pérez y Pato O’Ward la están rompiendo en Fórmula 1 e Indy Card, respectivamente, sin embargo, viene una camada muy interesante, en la se incluye a Mateo García, Jesse Carrasquedo, Regina Sirvent y ahora toca conocer a Ivanna Richards.
Sí, las jóvenes pilotos mexicanas están peleando por un lugar en los grandes escenarios del automovilismo e Ivanna está muy cerca de ingresar a la academia de Ferrari tras un rigurosos filtro, para el cual aplicaron 71 pilotos de todos el mundo, de las cuales sólo cuatro fueron seleccionadas para el último filtro.
La experiencia de Ivanna Richards en Ferrari
Ivanna fue elegida junto con la suiza la suiza Chiara Bätting, la portuguesa María Germano Neto y la sueca Milla Sjöstrand para ser parte del Campamento de Exploración de Kartisimo de la Academia Ferrari, tras un competencia de karts.
El campamento de llevó a cabo en las instalaciones de la escudería, en Maranello, Italia, y otras sedes, a finales de noviembre y en éste las cuatro finalistas tuvieron pruebas no sólo en pista, sino fuera de ella con evaluaciones mentales, talleres sobre velocidad de reacción, memoria, concentración, cursos de imagen y hasta del trato con los medios de comunicación.
Será este 7 de diciembre cuando Ferrari anuncie quien se se hace acreedora de la beca, misma que permitirá competir con el apoyo de la escudería, además de unirse a la categoría Senior de FIA Girls on Track–Rising Stars para competir en Fórmula 4, una vez que alcance la edad necesaria.
¿Quién es Ivanna Richards?
Ivanna es hija del expiloto mexicano de Nascar, Homero Richards, quien es el principal responsable de heredarle la pasión por el automovilismo. Por él compite con el número 20, que es el mismo número que usó Homero.
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Su máximo ídolo es Max Verstappen y su sueño es llegar a la Fórmula 1 y compite desde los cinco años de edad y entre su palmarés se encuentra el Campeonato Nacional Fórmula Karts de León, Guanajuato.
A los 11 años se convirtió en la primera mexicana en competir en Le Mans, Francia, por lo cual tenemos que considerarla como una de las promesas del automovilismo mexicano y parte de las apuestas para regresar la presencia femenina a los circuitos de Fórmula 1.
