Ahora que ya estamos muy cerca de Halloween vamos a aprovechar para hablar de TrES-2b, un planeta fuera de nuestro Sistema Solar que es el más oscuro jamás descubierto por la humanidad.
Los científicos afirman que es un planeta que orbita una estrella pero que está en perpetua oscuridad. Y sí, da miedo.
Ojo, esta no es una foto del planeta. No hay imágenes tomadas tan cerca, solo se sabe que existe y cierta información sobre sus características gracias al Trans-Atlantic Exoplanet Survey, tres telescopios que detectaron el paso del planeta frente a su estrella.
¿Cómo es TrES-2b?
TrES-2b o Kepler-1b es un planeta fuera de nuestro Sistema Solar que orbita la estrella GSC 03549-02811, que a su vez se encuentra en la constelación Draco.
Se trata de un planeta gigante gaseoso que fue descubierto en 2006 y que está a 702 años luz de la Tierra. La NASA explica que la masa de este planeta misterioso es de 1.49 veces la de Júpiter (es enorme) y tarda 2.5 días terrestres en completar una vuelta a su estrella.
Pero ¿cómo que es el planeta más oscuro jamás descubierto? Resulta que refleja la luz que le llega menos que el carbón, así de grave. Si algún día decides que tu lado darks maneje tu vida y viajas hasta allá, al entrar a su atmósfera estarías volando a ciegas en una oscuridad absoluta.
Pero no bastaría con llevar una lamparita, hay un resplandor rojo intenso que puede verse entre la atmósfera como si fuera lava: si logras sobrevivir entre tanta oscuridad tendrías que enfrentarte al aire hipercaliente.
¿Que por qué es tan oscuro? En realidad no se sabe. Una de las razones podría ser que no tiene nubes reflectantes como las que tiene Júpiter y que hacen que sea tan brillante.
De igual forma, podría ser que en la atmósfera hay sustancias químicas que absorben por completo (o casi por completo) la luz.
Pero si aún así tienes ganas de ir a echarle un vistazo, déjame decirte que suponiendo que pudieras viajar en carro a un velocidad de 95 kilómetros por hora desde la Tierra, tardarías 8 billones de años terrestres en llegar.
Si pudieras llegar hasta allá en avión, a una velocidad de 965 km/h, te tomaría 785 millones de años. Ahora que si te montas en una de las Voyager a una velocidad de 61 mil 155 kilómetros por hora, llegarías en 12 millones de años.
Pero, si encuentras algún vehículo que viaje a la velocidad de la luz sin que te haga papilla, a una velocidad de mil 079 millones 860 mil 824 km/h, entonces estarías en la oscuridad total en 703 años.
Así que además de una lamparita, llévate una revista porque te vas a tardar un poco.