La imagen que conservamos de Jim Morrison es la del poeta rockstar transformado en icono sexual, por siempre joven y atractivo. Las imágenes que sobreviven al paso del tiempo y la pérdida de la memoria colectiva nos retratan a un hombre en sus veintes, gozando de una vida hedonista, en los mejores años del movimiento hippie de la década de los 60. Pocos podían mantener el estilo de vida de sexo, drogas y rock ‘n’ roll del fallecido vocalista de los Doors.
Pero ya cuando nos sentamos a analizar con más cuidado la vida de alguien, entonces saltan los detalles que nos dibujan a un ser humano más complejo. Por ejemplo, Morrison puede ser recordado como un tipo que podía seducir a cualquier mujer con su mirada, pero en realidad, Jim nunca fue un hombre que cuidaba mucho el aspecto de su cuerpo. De hecho, un año antes de su muerte, era evidente el sobrepeso, resultado de una vida desenfrenada.
En una entrevista recientemente rescatada por el canal de televisión pública PBS, Jim Morrison revela que en sus días universitarios llegó a pesar 84 kg y que además se sentía fantástico, ya que podía derribar a todos los que se cruzaban por su camino. Sus propias palabras.
La entrevista con Howard Smith del Village Voice fue animada por Patrick Smith para la serie en linea de PBS: “Blank on Blank”. Puedes ver el video en seguida: