Y tú, ¿qué tanto tuerces tu reloj biológico?
El hombre y su afán por torcer las cosas. Se supone que por naturaleza, los seres humanos nacemos con un reloj biológico que va dictándonos la hora en la que debemos comer, dormir e incluso en la que estamos más activos.
Obviamente, conforme avanzamos como sociedad consumista (voy a sonar chairo, pero ni modo), las exigencias de la vida laboral y el ritmo de vida frenético que llevamos nos ha orillado a cambiar radicalmente nuestros horarios y sin darnos cuenta, darnos en la torre.
Después de tantas vueltas ya ni sabemos cuál es la hora en la que nuestro cuerpo se adapta naturalmente a distintas circunstancias. Afortunadamente la BBC, en asociación con profesores de distintas instituciones como The University of Oxford, The University of Manchester, The University of Surrey, The University of Cambridge y la Harvard Medical School, realizaron una interesante infografía con los lineamientos que sigue nuestro organismo de acuerdo a las distintas horas del día.
Échenles un ojo, y vean qué tan caótica es su vida.
00:00 a las 02:59 – El cuerpo se apaga
Es la hora en la que uno ya debería estar acostado, pues el cuerpo presenta varios cambios hormonales que nos indican que es hora de dormir, como la liberación de melatonina. El cerebro se limpia de las toxinas generadas tras un día de trabajo duro, los recuerdos se consolidan en la mente y los intestinos disminuyen su trabajo.
Los niveles de atención y vigilancia son bajos, por lo que estar despierto a estas horas propicia accidentes al conducir o trabajar.
03:00-5:59 – Cuerpo dormido
En esos momentos, se supone, estás dormido. Tu temperatura corporal central es mínima (más fría que en cualquier otro momento del día) y los niveles de melatonina en tu organismo aún son altos, pero van disminuyendo conforme se acerca el amanecer.
Por cierto, en este horario es cuando son más comunes los ataques de asma severos y los nacimientos naturales.
6:00 a las 8:59 – La hora más peligrosa para el corazón
Lo anterior parece canción de Arjona, pero en realidad nos referimos al momento del día en el que el corazón humano es más vulnerable a un ataque, pues los vasos sanguíneos se encuentran rígidos, la sangre es más pegajosa y espesa, además de que la presión arterial es alta.
Dicen que es un mal momento para hacer ejercicio.
9:00 a las 11:59 – La mente alerta
Si a esa hora ya estás en la chamba, aprovecha, pues es el momento en el que tu nivel de cortisol es mayor y tu cerebro está más alerta, por lo que gozas de mayor lucidez mental para resolver problemas o ser más productivo.
Las personas suelen ser más productivas antes del almuerzo pues la memoria a corto plazo se encuentran en su mejor momento del día.
12:00 a las 14:59 – La siesta biológica
Además del mal del puerco que sufrimos por la actividad gástrica, el cuerpo también se echa su pestaña, eso sucede alrededor del medio día. En ese momento nuestro estado de alerta disminuye y con ello, nuestra capacidad de realizar actividades como conducir un auto. De hecho, a las 14:00 horas suele registrarse un incremento en el número de muertes por accidentes carreteros.
Tampoco se recomienda beber alcohol en este lapso pues puede hacerte sentir aún más somnoliento.
15:00 a las 17:59 – La hora del ejercicio
Es el momento ideal para ponerte a sudar. La temperatura corporal aumenta de forma natural, haciendo que los pulmones y el corazón (rendimiento cardiovascular) funcionen óptimamente. En este momento los músculos están 6% más fuertes que en su punto más bajo diario.
18:00 a las 20:59 – Cuidado con lo que comes
Abusados con este periodo de tiempo, pues es cuando peor le cae al organismo tener una comida grande ya que aumenta el riesgo de diabetes y obesidad. Pero en compensación, es el mejor momento para beber alcohol pues es cuando el hígado lo maneja mejor.
A esta hora el pensamiento intuitivo mejora.
21:00 a las 23:59 – A prepararse para dormir
Es el momento en el que la glándula pineal del cerebro comienza a producir melatonina para facilitar que nos quedemos dormidos. La temperatura corporal comienza a disminuir. Lo ideal es irse a dormir en este tiempo.
Varios atletas buscan este momento para romper marcas deportivas.
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Ahora, de acuerdo a la hora en la que lees esto sabrás qué está pasando con tu cuerpo, y qué actividad es la más conveniente para ese momento.