Mientras que Luis Videgaray continúa vanagloriándose de que con todo y que se redujo la expectativa de crecimiento económico, no estamos tan “fregados” como otros países, la triste realidad no cuadra con una economía que va por buen camino, ya que un hecho que puede entender hasta el más lerdo en cálculos es el siguiente: no es bueno que salga más dinero del que entra.
Según cifras del Banco de México, lo anterior está ocurriendo con los capitales del país: en los últimos cinco trimestres 29 mil 799.8 millones de dólares han salido de México para colocarse en bancos del extranjero.
Esto no es bueno, ya que la cifra de depósitos en los últimos 15 meses duplica la cantidad de dinero que entró al país por medio de divisas adquiridas por la contratación de nueva deuda externa, la cual asciende a 15 mil 666.4 millones de dólares. Es decir, existe la siguiente relación: salen dos dólares del país y me endeudo con uno.
Sin embargo esta tendencia no es nueva. En el periodo 2007-2008 los mexicanos de mayores ingresos ya comenzaban a sacar su dinero del país: enviaron 45 mil 704.8 millones de dólares fuera del territorio, de los cuales 82 % tuvieron como destino bancos del exterior, y el 18 % restante se colocó como inversión directa.
Sólo en los primeros tres meses de este 2014 han salido de México 2 mil 377 millones de dólares, con lo que se comprueba que ni los mexicanos más billetudos gustan de mover sus ahorritos en nuestro país y ni se diga invertir: 2 mil 644 millones de dólares entre enero y marzo de este año se han esfumado para utilizarse con esa finalidad… pero en otros lugares.
Según cálculos de especialistas el total de capital mexicano que ha optado por emigrar es de nada más 348 mil 372 millones de dólares… pequeña cifra que representa casi el doble de lo que el país informó como reserva internacional de divisas el pasado 20 de mayo: 186 mil 289 millones de dólares.