Recibimos el fin de semana con la triste noticia de la muerte de Ángel Mora, el último historietista mexicano del siglo pasado que dio vida a las “aventuras de selva y mar” de Chanoc, además de otras historias como Alma Grande y El Payo. Mora falleció la madrugada de este viernes a sus 92 años de edad en el hospital Neurológico de Cocoyoc en Morelos, luego de un coágulo inoperable en la cabeza ocasionado por una caída que sufrió en su casa.
El dibujante Zenaido Velázquez fue quien lo cuidó durante sus últimos días de vida. El cuerpo de Ángel Mora será cremado esta noche en el panteón Jardines del Recuerdo en Tlanepantla, Estado de México. Su hijo, Rafel Mora, confirmó a Milenio que el artista dejó pendiente la publicación de 15 tomos de Chanoc con historias inéditas, y un libro llamado Así dibuja Ángel Mora donde compartió la técnica de su estilo. Estos trabajos saldrán próximamente bajo Editorial Porrúa.
Mora es el último de los grandes artistas de historietas en nuestro país en morir, uniéndose a Sixto Valencia (creador de la imagen de Memín Pinguín) y Vargas Dulché.
Chanoc es un pescador y aventurero de corazón que siempre esta acompañado por su padrino Tsekub Baloyán, quien solía apodarlo como cachorro mientras trata de orientarlo por el buen camino, aunque siempre es él quien termina siendo salvado. Fue creado en 1959 junto con el escritor Martín de Lucenay y luego de su muerte la historia fue continuada por Pedro Zapiain Fernández, además de otros nombres como Conrado de la Torre. Posteriormente fue llevado al cine en varias ocasiones con una primera versión en abril del 67 protagonizada por Andrés García, aunque la versión más conocida es la de Tin-Tán en el 70.
Curiosamente este personaje fue presentado por primera vez para un guión de cine escrito por Lucenay que le fue encargada a Mora en Publicaciones Herrerías, el lugar donde trabajaba en aquel entonces. Las últimas apariciones de Chanoc fueron en forma de tira cómica para Milenio.
Descance en Paz, Ángel Mora.
