En Sopitas.com andamos de estreno. Hoy les presentamos la sección “Vagando”, cuyo objetivo tiene descubrir lugares fuera de lo común o poco conocidos de la Ciudad de México y ocasionalmente de la provincia de nuestro país.

Lugares que no aparecen en las guías turísticas ni en las recomendaciones de las revistas, pero que tienen su encanto y que valen ser visitados. Dicho esto, comenzamos con nuestro primer sitio.

El London Karaoke

No hace mucho me enteré de la existencia de uno de estos lugares en una plática entre amigos.

-¿Han ido a un karaoke coreano?, preguntó una amiga. Le contestamos que no y de paso le preguntamos sobre la diferencia entre un karaoke convencional y uno coreano.

-Es otra cosa. Hay canciones en coreano, está lleno de luces, son cuartos personalizados y hasta te dan unos panderos electrónicos.

Aunque acordamos que algún día visitaríamos un sitio de estos, jamás pensé que sería una experiencia tan divertida. Para empezar, dar con estos lugares no es tan fácil. Por alguna razón estos negocios se mueven en la clandestinidad. Dar con referencias sobre ellos no es tan fácil. Tras investigar di con los datos del ‘London Karaoke’, que según averigüé después, es el mejor de su tipo en la Ciudad de México.

El London se ubica en el tercer piso del edificio marcado con el número 167, en la calle de Londres, casi esquina Florencia, en la Zona Rosa de la Ciudad de México. Hay varios karaokes en la zona, pero no hay que confundirse, aunque en el mismo edificio vean varios negocios similares, el bueno es el London Karaoke.

La aventura inicia desde que se pone un pie dentro del edificio y se camina por un pasillo hasta la puerta del elevador (que está junto a la puerta trasera de un bar). Después de subir por el ascensor y llegar al tercer piso se tiene la sensación de ya no estar en el Distrito Federal, sino en Seúl. Carteles y publicidad con símbolos orientales. Algo flota en el ambiente que hace al visitante sentirse extranjero.

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Lo primero que llegó hasta nuestros oídos fue música. Varias personas cantando, risas, gente feliz. Sin embargo todas las puertas de aquel piso se encontraban cerradas, menos una, que es donde hay una especie de recepción con una pequeña sala en donde una familia coreana nos dio la bienvenida.

Ellos llegaron a México hace más de diez años provenientes del país asiático. Desde que entré me trataron amablemente. A pesar de hablar muy poco español, uno  consigue hacerse entender con ellos. Días antes había hecho una reservación, así que al llegar di mi nombre, y junto con mis acompañantes fui dirigido hacia un amplio pero acogedor cuarto en el que todos pudimos instalarnos cómodamente.

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En medio hay una gran mesa para colocar alimentos y bebidas. Enfrente, un escenario con dos micrófonos y una pantalla. Contrario a lo que ocurre en otros karaokes, aquí son los propios clientes quienes eligen el momento y orden de las canciones que desean cantar. Basta seleccionar el número de melodía, pulsarlo en un curioso y moderno control remoto, y listo. Además de un amplio repertorio en español, el London Karaoke cuenta con catálogos para interpretar piezas en coreano, inglés, japonés y chino.

Y sí, hay panderos electrónicos con luces de colores.

El cuarto sólo está iluminado por unas luces tenues, que le dan un toque íntimo y de confianza. Uno deja de temer hacer el ‘panchazo’ mientras canta, pues se encuentra en un espacio cerrado en el que sólo están tus conocidos. Si se desea pedir algo de tomar o algún refrigerio coreano, lo único que se debe de hacer es tocar un timbre ubicado cerca de la puerta. A los pocos minutos un mesero hace su aparición. Las cuentas se manejan de manera individual, así cada quien paga lo que consume sin preocuparse de ser desfalcado por lo que otros toman. Por cierto, los precios son accesibles.

De pronto, las luces del cuarto se tornan de extraños colores que dan un efecto láser-sicodélico al lugar. En un ambiente así de festivo a todos se les va la pena y hasta los más ‘rancheros’ o introvertidos terminan cantando.

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Después de horas de cantar y casi quedar afónicos, poco antes de las 2 de la mañana el dueño hace su aparición para avisar que el lugar está punto de cerrar. Aquí sí, por más que se ruegue no hay ni tantita flexibilidad. Los coreanos, como buenos asiáticos, son muy disciplinados con sus horarios.

Se abandona el London Karaoke con ganas de haberse quedado más tiempo y con la promesa de volver muy pronto. Y qué bueno, porque eso quiere decir que la noche fue buena.

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Si quieren pasar una noche pintoresca y un tanto surrealista, no dejen de visitar el London Karaoke.

Los precios de las salas son los siguientes:

Sala normal: 250 pesos por hora (hasta 20 personas)
Sala VIP: 350 pesos por hora (hasta 60 personas)

Los precios de las bebidas y alimentos son aparte, pero bastante accesibles. El consumo en promedio por persona es de 150 pesos.

Pueden hacer su reservación en los siguientes números: 044 55 16537960, 044 55 32012100 y 52 07 26 55. También puedes checar su página en Facebook.

El próximo martes en “Vagando”: La Capillita de Manzanares.

Si tienes algún sitio interesante y poco conocido que crees que debamos conocer, no dejes de mandar un mail a: gabriel@sopitas.com

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