Lo que necesitas saber:
La carrera espacial por propulsar cohetes espaciales con metano/LOX acaba de ser liderada por China pero ¿ganada? Tal vez no.
Un día histórico. Este 11 de julio una empresa china logró poner en órbita terrestre un cohete propulsado por metano, el primero en la historia.
Se trata del Zhuque-2 o Suzaku-2 de la empresa privada Blue Arrow Space Technology (LandSpace). Después de un lanzamiento fallido en diciembre de 2022, este día se logró.
El primer cohete propulsado por metano
Lo primero que hay que mencionar es cómo funciona el cohete chino creado y desarrollado por la iniciativa privada china. El Zhuque-2 es el primer cohete propulsado por metano líquido que logra ponerse en órbita de la Tierra.
Ya antes, en abril de 2023, el Tianlong-2, de la empresa Space Pionner (Beijing Tianbing Technology Co), logró llegar a la órbita terrestre pero propulsado por queroseno líquido.
El Zhuque-2 es un cohete que utiliza oxígeno líquido de metano como propulsores. Tiene un diámetro de 3.35 metros, una longitud total de 49.5 metros y motores que producen 268 toneladas de empuje.
La empresa LandSpace explica que tiene una capacidad de carga útil de 6 mil kilogramos en una órbita terrestre baja de 200 kilómetros o de 4 mil kilogramos en una órbita sincrónica solar de 500 kilómetros. El 14 de diciembre de 2022 un primer lanzamiento de este cohete de dos etapas falló.
La carrera espacial para usar metano líquido como propulsor
No crean que China es el único país que está trabajando en el desarrollo de cohetes espaciales propulsados, por ejemplo, por metano. Hay varios proyectos en desarrollo en SpaceX, United Launch Alliance de Estados Unidos, Blue Origin, Rocket Lab, Relativity Space e incluso la NASA.
Ahí va. La mayoría de los cohetes, por ejemplo de la NASA, usan hidrógeno y oxígeno líquido, o bien otros compuestos químicos sólidos como combustible. Pero desde hace varios años están probando utilizar metano y otros derivados.
El metano (CH4) es el principal componente del gas natural que abunda en las zonas exteriores del Sistema Solar.
“En cierto modo, es curioso que este gas inflamable nunca antes haya sido usado para propulsar naves espaciales“, explica la NASA.
Esto tiene muchas ventajas como reducir el costo del lanzamiento ya que los tanques de combustible de metano no necesitan tanto aislamiento. Además, son más pequeños ya que el metano líquido es más denso que el hidrógeno líquido.
El metano, además, es considerado como un propulsor verde a diferencia de otros combustibles que se usan en muchos vehículos espaciales, contamina menos.
Se le conoce como LOX/metano o methalox porque es una mezcla de metano líquido con oxígeno líquido (LOX), que es la forma líquida del dioxógeno.
La llama que sale de los propulsores en los cohetes que usan este tipo de combustible es azul porque el oxígeno líquido es azul.