Entre más pasa el tiempo, más descubrimos que los viajes sirven para regalarle experiencias únicas a nuestra vida. Casas, hoteles y todos los universos que ofrecen plataformas como Airbnb, son hechas para que no haya pretextos y simplemente armemos las maletas y vayamos a conocer México.
Por eso, la recomendación siempre será viaja. A dónde puedas, cómo quieras, con quien quieras. Intenta conocer sitios nuevos y extraños que desafíen tus fantasías o las hagan reales. Cada travesía abre los sentidos de par en par y evita que como decía John Lennon; la vida sea eso que pasa mientras estamos ocupado haciendo otras cosas.
En honor a esto, y para la satisfacción de los indecisos que no saben a dónde pasar sus siguientes vacaciones, hemos seleccionado un grupo de alojamientos asombrosos en México. Estancias que en vez de paredes tienen cristales, que cuentan con jardines llenos de esculturas o pequeñas casas de campo trepadas en los árboles, aquí el límite es el infinito.
Casa Colmena
Se trata de una intrépida cabaña que se encuentra literalmente en medio de la montaña. Lo que hace extraño, y a la vez encantador, a este alojamiento es su arquitectura; ya que tiene forma de fractal y techos de cristal desde los que se pueden contemplar las cordilleras que componen Amatlán, Morelos.
Aquí los huéspedes podrán tener un contacto profundo por la naturaleza, caminar por el bosque y pasar la noche en una extraña cama redonda. Para los habitantes de la zona este sitio, a las faldas de la montaña, es casi místico, de hecho hay quienes aseguran se aquí se han llegado a avistar OVNIS. ¿Será?
El vocho hotel
Se trata de un campamento totalmente ecológico; en el que se prioriza el reciclaje y la energía solar. Sin embargo, lo que lo hace único es que en esta estancia los cuartos son dentro de los tradicionales, y ya casi extintos Volkswagen.
A pesar de la rareza, este alojamiento cuenta con todos los servicios, desde WIFI, hasta un restaurante donde se puede probar comida de la zona. Aunado a esto los huéspedes pueden disfrutar de las bellezas naturales de Yucatán y bañarse en una de las pocas albercas ecológicas que hay en el país.
El nido del Quétzal
Este espacio parece sacado de la imaginación de un artista surrealista. Aquí los huéspedes pueden pasar los días entre cristales de colores, esculturas inspiradas en el vuelo de quetzal y un jardín tan extraño que estamos seguros no hay otro en el mundo.
La estructura de la casa tiene la forma de una gran serpiente en movimiento, casi arrastrándose por una buena cantidad de espacios verdes, entre los que hay cañadas y cuevas. La casa, espaciosa hasta para cuatro personas, está muy cerca de la CDMX, en el Estado de México.
Hotel Burbuja
Rodeado de enredaderas, este alojamiento es el paraíso para los entusiastas de ver estrellas y conectar con el cosmos.
Lo que lo hace diferente, es no sólo está en el corazón del Valle de Guadalupe, sino que se trata de un glamping (campamento de lujo) con forma redonda y techo de cristal que genera una atmósfera única en el mundo. ¿Cuál de todos visitarían ustedes?