Hablemos de tacos, es más, hablemos de tacos deliciosos que se comen de pie, en una esquina emblemática de la Colonia Condesa. Tacos que son casi poéticos, de doble tortilla, plato de plástico, una buena colección de salsas y un nombre familiar para los verdaderos conocedores de este manjar mexicano, Don Juan.
Esta taquería, cuyo interior recuerda una de esas casas de los años 70, con piso de mármol, grandes refrigeradores, uno que otro cuadro inexplicable adherido a los muros, y una caja para cobrar que recuerda la vieja taquilla de un cine, es un monumento al barrio fue algún día fue la Condesa.
A lo largo de cuatro décadas, Don Juan ha sido testigo de todo. De los temblores que han cimbrado el barrio, de su gentrificación e incluso de la secuencia más importante de Amores Perros, la del choque. Sobrevive a pesar de que todo a su alrededor se mueve y eso la convierte en imprescindible.
Aquí los comensales hacen largas filas, que a veces se salen del local. Cuando llegan escogen entre una amplia variedad de guisados (uno mejor que otro), después preparan sus tacos en una barra llena de cosas, que incluye la mejor salsa de aguacate del barrio.
La historia de los tacos Don Juan
Los tacos Don Juan son mucho más que un establecimiento, son un pedazo de historia que comenzó a escribir hace casi 40 años.
Empezó cuando Juan (el hombre que bautizó el negocio) decidió poner una carnicería en la esquina de Juan Escutia y Atlixco. Los cortes que vendía pronto llamaron la atención de los colonos y el establecimiento ganó popularidad.
Tras una década de vender carne en el barrio, Don Juan dio el siguiente paso en su historia y comenzó a ofrecer tacos. La idea fue de su hijo, que le pidió a su padre un espacio para darle a los comensales una combinación magistral que hoy en día sigue siendo famosa: longaniza, bistec y tortillas.
Estos tacos combinados lo revolucionaron todo y pronto comenzaron a tener clientes regulares. Con el tiempo, el espacio en la carnicería se transformó en una taquería en toda la extensión de la palabra.
¿Qué se come en Don Juan?
En don Juan cada taco es una comida completa, deliciosa y con todo lo que se necesita para satisfacerse como se debe el apetito.
Aquí las personas pueden elegir entre una multitud de guisados (que cambian según el día). Es recomendable, en particular probar el de la casa; una asombrosa combinación de longaniza, carne y salsa.
También vale la pena probar lo tradicional. Uno no puede visitar Don Juan sin probar el suadero, el bistec y hasta medallones de res. Cada uno es acompañado con arroz y frijoles bayos, dos tortillas y salsa Jalisco o verde de guacamole, cada quién decide.
Para los más hambrientos los tacos se pueden acompañar con aguas de sabores y un chocolate en forma de conejito que está exhibido al lado de la caja.
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De tanto en tanto, vale la pena conocer cambiar de taquería y regresar a los clásicos.
Dirección: Juan Escutia, esquina Atlixco.
Horario: Lunes a Domingo desde las 10 am