Ahora sí que para donde sea que se voltee la cosa está igual o peor.
Pese a las cifras alentadoras en materia de disminución de la violencia con la que se cerró el 2013, ahora de repente ha habido un “repunte”, ya que tanto críticos del gobierno de EPN, como el propio presidente han evidenciado su inquietud respecto en varios estados del país.
En el primer caso, el activista y poeta, Javier Sicilia, ha manifestado su malestar por la inexistente presencia de las autoridades en Morelos, las cuales, aunque han cambiado –sólo de personal- no han representado una mejora en las condiciones de seguridad, por el contrario:
“Si no dan paz y seguridad a la sociedad, simplemente no existen como Estado. Podemos definirlo como narcoestado, Estado fallido; de todas las maneras, pero no como un Estado. Las instituciones tienen sentido si dan seguridad, paz y justicia a sus ciudadanos, sino son simplemente elefantes blancos (…) Graco cuando estaba en campaña ni siquiera entendía la dimensión del problema y habló en demasía diciendo que en 18 meses resolvía esto, y resulta que no, que la situación es sumamente grave. Estamos igual e incluso peor en muchos sentidos que las administraciones pasadas”.
Además de lo anterior, el líder del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, también denunció las atrocidades que se viven en Morelos, donde se vive con miedo de salir a las calles; incluso en Cuernavaca se tiene una especie de “toque de queda” en el que la hora límite para estar en público es las 9 y media de la noche.
El problema, al igual que en otros varios estados, es la impunidad y la relación delincuencia-estado, la cual ha hecho que “en otros lugares (como Michoacán y Guerrero) la población llegó al límite, hay una reacción defensiva de cierta dignidad de las comunidades amenazadas y víctimas del crimen y un Estado que no está haciendo nada”.
Precisamente en esos estados que mencionó Sicilia, en entrevista para sinembargo.mx, es donde ahora el presidente Peña Nieto tiene centrada su preocupación, debido a las “dificultades” en materia de violencia que se viven, esto según palabras del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong:
“El tema de la seguridad es el tema principal que le ocupa al gobierno de la República (…)“(En) Guerrero por supuesto reconocemos ahí, y reconocemos que en otras entidades, que por supuesto tenemos dificultades, tenemos todavía problemas y que no echamos las campanas al vuelo, pero estamos convencidos de que estamos avanzando (…) Hoy tenemos preocupaciones como la de Michoacán y vamos a seguir adelante, lo hemos comprometido y por supuesto vamos a hacer realidad, el devolver la paz a todos los habitantes de ese estado”.
No obstante, para Sicilia, Peña Nieto ha sido un presidente que ha brillado por su ausencia cuando de combatir a la violencia e inseguridad se refiere: “ha estado bastante omiso frente a la tragedia humanitaria y la emergencia nacional que hay en el país (…) Con Peña Nieto no hay cambios, la realidad está terrible, es atroz, hay zonas balcanizadas y tomadas por el crimen organizado, altos índices de muertos”.
La preocupación de Javier Sicilia por Morelos no es para menos, ya que, de acuerdo con estadísticas del Sistema Nacional de Seguridad Pública, este estado ocupó el primer lugar en la lista de las entidades con más secuestros del año pasado, con un incremento de 80% en relación al 2012.
El caso es que Morelos, en materia de secuestros, está por encima de otras regiones del país como Tamaulipas, Tabasco, Michoacán y Guerrero, Morelos, que no aparecen en el discurso oficial de Osorio Chong: ““en muchas de las regiones que se habían venido hasta hace apenas un año señalando como inseguras, con violencia en las calles, en los bulevares, en los centros comerciales, hoy es distinto totalmente”, como en Veracruz, Nuevo León, Chihuahua, Tamaulipas y la región de La Laguna.