Gabino Cué, gobernador de un estado que no está precisamente nadando en dinero (¿cuál sí?), puede darse el lujo de poseer una mansión valuada en 7 millones de dólares, ¿cómo le hizo?, ¿con su sueldo de gober?
Pues eso es lo que precisamente pregunta Sergio Hernández, pintor oaxaqueño que reta a Cué a revelar quién pompo el mega jacal ubicado en una zona exclusiva de la ciudad de Oaxaca… en la que varios de sus colaboradores son sus vecinos.
“Están todos amurallados, es un acceso restringido. No son casitas de interés social, ni de 200 metros. Hay varias casas ahí que se han ido construyendo los secretarios del Gobernador”.
El reto de Hernández no es gratuito. Según reporta Reforma, a cambio de que el gobernador aclare de dónde salieron los millones para comprar su residencia, él presentará la documentación con la que valida una construcción que le fue clausurada en la playa de Zipolite… de acuerdo con el pintor, la clausura de su construcción fue por ser parte del grupo que se opone a la construcción del Centro Cultural y de Convenciones (CCCO).
Tanto Hernández como el también pintor Francisco Toledo han recibido amenazas y agresiones por parte del gobierno de Oaxaca, razón por la que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) pidió a la Fiscalía General y a la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca implementar de medidas cautelares a favor de los artistas.
Pero bueno, regresando al tema de la mansión del gober, ésta fue diseñada por la arquitecta Renata Elizondo, quien en su página de internet detalla que la construcción fue realizada en un terreno a desnivel… detalle aprovechado para dividirla en tres pisos: “en el primero hay un recibidor con baño, en el segundo está situada una sala y un comedor largo y en el tercero se ubican 2 habitaciones con baño, una sala de entretenimiento y un largo palco” detalla Reforma.
Con alberca, pisos de madera, jardines de arcilla y decorada con plantas de la región, la casita ya fue desmentida por las autoridades… pero, en caso de existir, ya avisaron que la aclaración de dónde provino el dinero para su compra no será a través de los medios de comunicación, señaló Miguel Muñoz, vocero de Cué.
“No hay casa, ni edificio. Quien acusa o denuncia tiene la carga de la prueba”.