La vida está hecha de mentiras.
Que tu mamá te diga que eres el más guapo cuando sabemos que existen Brad Pitt o Leonardo DiCaprio es tan sólo un ejemplo de ello. Y que tu novia te diga que te prefiere a ti antes que a Tom Brady o a George Clooney es lo mismo.
Sin embargo, pocas mentiras son tan crueles como el mito de la primera fila. Sí, por alguna razón siempre nos han hecho creer que la primera fila es lo mejor que nos puede ocurrir… pero no es cierto.
En los camiones, tus piernas chocan con una pared y no hay espacio para encontrar algún recoveco que ofrezca comodidad; en el teatro, terminas con una tortícolis horrible; y en los conciertos… bueno, no voy a decir que es lo peor, pero uno termina por ver sólo una parte de lo que ocurre en el escenario.
Pero si hay un lugar donde la primera fila es una tragedia, sí o sí, es en el cine.
De hecho, en los últimos años ir al cine se ha convertido en una pequeña minitragedia, donde uno no puede ver siquiera una película tranquilamente sin que los meseros se estén atravesando en plena secuencia de acción o, peor aún, sin que el señor de al lado se la pase explicándole la película a su acompañante… ¡a 46 decibelios!
Ahora bien, si siempre se nos ha dicho que la primera fila en el cine es una tragedia, ¿cuál es el mejor lugar para sentarse en una sala cinematográfica?Las mamás dirán que es el que mejor te acomode, o tal vez, el que esté disponible.
Pero gracias a los ingenieros de sonido de THX, ahora se han confirmado nuestras sospechas de toda la vida: los mejores lugares son aquellos que están en ubicados en las filas que están un poco más atrás de la mitad y al centro.
Ese es el punto desde el que los micrófonos de Surround y THX calibran el sonido de la sala, permitiendo así brindar una experiencia envolvente a todos los asistentes. Más envolvente para unos que para otros.
Y si creían que les daría algún numero y letra exacta, la realidad es que eso es algo imposible sencillamente porque cada sala varía de dimensiones y por supuesto de capacidad… y sí, muchos ya sospechábamos cuáles eran los mejores asientos en el cine, sólo que ahora la física se ha encargado de confirmarlo.
¿Ya ven como el mito de la supremacía de la primera fila es una mentira?
