Una de las cosas que más le inquietan a los seres humanos es saber el momento de su muerte. Por más que las abuelitas nos digan que “sólo Dios sabe cuándo es el momento”, somos necios y nos gustaría tener una idea de más o menos cuando colgaremos los tenis.
De acuerdo a un estudio realizado por un grupo de científicos y publicado por la revista “Annals of Neurology”, las variaciones provocadas por el gen regulador de nuestro reloj biológico podrían determinar el momento en el que vamos a morir.
“El reloj biológico interior regula muchos de los aspectos de la biología y conducta humana. También incluye en la hora de estados clínicos agudos, como el derrame cerebral y el infarto”, comentó Andrew Lim, del centro médico Beth Israel, en Boston, y jefe responsable de la investigación.
En un principio, el objetivo de Lim y su equipo era hallar el rastro genético que determina el padecimiento de enfermedades como el alzheimer o el parkinson. Para eso 1,200 personas mayores de 65 años fueron sometidas a un estudio en el que una pulsera colocada en su muñeca vigilaba sus ciclos de vigilia y sueño. Fue así como descubrieron que quienes acostumbran a madrugar y dormirse temprano, mantienen diferencias genéticas respecto a quienes se levantan y acuestan tarde.
Un nucleótido al ser combinado con el gen Period 1, marcaba que los madrugadores tenían un 60% de adenina (A), y quienes trasnochan un 40% de guanina (G). Como el adenina y la guanina están presentes de manera doble debido a que el humano está conformado por cromosomas, quienes portan la combinación A-A se despiertan una hora antes que los portadores de la estructura G-G y media hora antes que los A-G.
Al morir estas personas, se iba comparando las variedades genéticas y se encontró que las personas con combinación A-A y A-G (los que madrugan) morían alrededor de las 11 de la mañana. En cambio, quienes portaban la carga genética G-G lo hacían cerca de las 6 de la tarde.
¡Quiubo!
Yo hice la prueba con un par de personas que han muerto recientemente y coincidió. Sin embargo, y como dijo el propio Andrew Lim, aún hace falta realizar más estudios para comprobar la relación entre el momento de la muerte y el reloj biológico
De acuerdo a esto, ¿a qué hora vas a morir?