En 2019, Dolores Reyes publicó su primera novela bajo el título Cometierra, la cual acaba de estrenar una adaptación en formato de serie de la mano de Prime Video. La producción llega con algunos cambios importantes en su historia y desarrollo.
La novela está ambientada en la periferia de Buenos Aires, Argentina, y sigue a una chica —a la que llamamos Cometierra— que posee un don sobrenatural: al comer tierra, tiene visiones sobre el paradero de personas que estuvieron en contacto con ella. Así, familiares de desaparecidos o víctimas de violencia acuden a ella para pedir su ayuda.
Cometierra también carga con sus propios muertos y desaparecidos, que se suman a los muchos casos especiales que intenta resolver en su provincia. La novela fue todo un éxito —cargado de controversias, eso sí— y, por la forma en que está narrada, era evidente que el siguiente paso sería una adaptación.

La serie de Cometierra en Prime Video
Como mencionamos, Prime Video adquirió los derechos de Cometierra para convertirla en una serie. También adelantamos que presenta algunos cambios sustanciales: el más importante es que la historia deja Argentina para situarse en México y sigue a una joven llamada Aylin, quien tiene visiones terribles de quienes sufrieron en la tierra que traga.
El elenco está encabezado por Lilith Curiel, la protagonista. Roberto Aguilar interpreta a Walter, el hermano de Aylin; Yalitza Aparicio da vida a la maestra Emma; Harold Torres aparece como el policía Ezequiel; y Mabel Cadena es Lourdes, la madre de Aylin.

Ellos conforman la base de un universo que se construye en las periferias de la Ciudad de México, donde las tragedias son tan cotidianas que hace falta agregar elementos sobrenaturales para dimensionar el verdadero horror de la violencia, un común denominador en América Latina.
Por eso, queremos presentarles la charla que tuvimos con tres de sus protagonistas: Lilith, Yalitza y Mabel.
México y Argentina: la región de los desaparecidos
Uno de los aspectos más relevantes de la novela Cometierra es su identidad argentina: la idiosincrasia, el lenguaje y el contexto son fundamentales. Trasladar la historia a otro país y a una ciudad con una identidad tan marcada como la Ciudad de México fue una apuesta arriesgada, pero funcional.
Sobre todo, porque aborda una problemática compartida en Latinoamérica a través de la figura de los desaparecidos: la incertidumbre como consecuencia de la corrupción y la colectividad como forma de resiliencia. Ese elemento incluso le da un tinte detectivesco a la historia.
Lilith: Independientemente de que la novela sea argentina y esta serie suceda en México, no cambia absolutamente nada porque pasa aquí, pasa allá, pasa en Latinoamérica y, en general, en todo el mundo. Piensas en eso y piensas en Latinoamérica, tristemente.
En ningún momento creo que ella se ponga en ese papel (policía)… Creo que más que nada es por un movimiento y una energía que tenemos las mujeres. A pesar de que yo no he vivido una experiencia similar y tan horrible como las desapariciones o feminicidios, puedo conectar perfectamente con cualquier otra mujer o persona que lo haya vivido.
Porque sé que es una realidad que afecta a muchas personas. No lo veo detectivesco ni nada de eso; más bien, es esa energía de querer ayudar, muy familiar.

Un personaje que se comparte
Yalitza Aparicio interpreta a la maestra Emma, una figura relevante en la vida de Aylin y de los estudiantes de la escuela donde enseña. De alguna manera, detona el don de la protagonista al convertirse primero en una especie de fantasma y luego en una motivación dentro de la historia.
Yalitza: Fue algo que fui construyendo con este personaje y hay muchas cosas que siguen removiéndome y provocándome sensaciones.
Creo que es algo que me impacta, que me remueve demasiado, pero existe esta empatía en nuestra sociedad. Y con el hecho de que es una maestra, fue una serie de emociones en todo momento. En algún momento fui docente dentro de un aula y pensar que tu maestra ya no regresó, buscar el porqué, querer encontrar una respuesta…
La sociedad tiene cosas malas, pero existen estas generaciones, existen estas personas que moverían cielo, mar y tierra para encontrar a alguien.

Cometierra: una historia de ausencias
A lo largo de la serie, vemos que los personajes también se construyen a partir de las ausencias, que se reflejan en los espacios, las casas y las familias rotas. El personaje de Mabel Cadena, Lourdes, es quizá el ejemplo más claro del impacto emocional de estas ausencias.
Mabel: Creo que las mujeres hemos heredado no sólo la obligación de maternar a otros, sino de automaternarnos. Eso me llevó a este lugar donde me encontré con Lourdes, en un espacio de reflexión donde, lejos de ser únicamente una carga dolorosa —que lo es—, sanar heridas heredadas se vuelve una oportunidad maravillosa.
Cuando te das cuenta de que ya no eres una adolescente y tienes la posibilidad de hacerte cargo y cambiar esa narrativa… Creo que tanto Cometierra como el grupo de adolescentes que la acompaña dan la posibilidad de construir juntas y juntos —sin importar el género— una sociedad que atraviese menos estos dolores y violencias heredadas, que deberían tener un mejor destino.

