Cuando creíamos (y esperábamos) que Felipe Calderón había dejado cifras de violencia e inseguridad que serían difícilmente superadas, llegó Enrique Peña Nieto… y con su indiferencia…
Cuando creíamos (y esperábamos) que Felipe Calderón había dejado cifras de violencia e inseguridad que serían difícilmente superadas, llegó Enrique Peña Nieto… y con su indiferencia…