Durante el 2013, les dimos a conocer una innumerable cantidad de historias de amor pero la verdad nada se compara con el momento en que las parejas contraen nupcias, ese torbellino de emociones que nos puede hacer reír o llorar.
Desde personas que decidieron compartir su matrimonio con su padres que tenían enfermedades irreversibles, parejas que sin importar las limitantes físicas llegaron al altar y muchas historias más que nos hacen recordar, una vez más, que el amor puede más que cualquier cosa.
De ahí que Huffington Post decidiera enumerar algunos de estos momentos que nos regaló el año pasado como los más interesantes y sobre todo, que causaron conmoción alrededor del mundo.
Amor de aeropuerto
Un marino de Estados Unidos le pidió a su novia de la secundaria que se casara con el pero no de una forma habitual, sino que cuando Dylan Ruffer regresara de Siria, la chica lo estaría esperando para unirse por siempre en el Aeropuerto Internacional de Reno-Tahoe.
El padre que no podía perderse la boda
Normalmente los padres entregan a la hija hasta el altar, lo que simboliza que entregan lo más preciado al hombre que ahora se hará cargo y buscará lo mejor para ella, tal y como lo hizo Walter Schupp Jr. que aunque sufrió un derrame cerebral, se recuperó de muy buena manera y no faltó a la boda de su hija, Victoria Torres.
Mensaje desde los aires
Esta historia no tiene que ver en sí con la pareja que llegó al altar, sino con uno de los invitados. Mateo Krivohlavy, un piloto de guerra, no pudo asistir a la boda de su hermano por estar en Afganistan pero se hizo sentir al grabarse y enviarle un mensaje a los esposos desde los aires.
Le cancelaron pero completa el banquete
Normalmente cancelar una boda nos haría pensar que habría tristeza y dolor pero para Tamara, hija de Carol y Willie Fowler fue todo lo contrario, ya que decidió convertir ese sentimiento en ayuda hacia la gente sin recursos y regaló su banquete de bodas a cientos de personas sin hogar.
Una boda sin limitantes
Después de meses y meses de rehabilitaciones, de un gran esfuerzo por recobrar el movimiento en sus piernas que había perdido en un accidente cuando tenía 17 años, Stevie Beale llegó al altar por su propio pie, en algo que dejó contentos a más de uno.
Felicidad y tristeza en poco tiempo
Jodie, Sarah, y Kaylee son tres mujeres que se casaron al mismo tiempo hace un par de meses con el afán de hacer feliz a su madre, quien sufría cáncer de mama. Todo transcurrió muy bien, Becky Swales entregó a sus hijas en el altar sin saber que un día después todo cambiaría, la señora fallecería a causa de su enfermedad.
El vestido de bodas perfecto
Ruth Sullivan no tuvo un vestido de novia cuando se casó en 1946, en ese tiempo, Sullivan y su esposo, Norm, no tenían suficiente dinero para una boda apropiada. Así que depués de que ambos regresaron de su servicio en la Marina durante la Segunda Guerra Mundial, ella usó un vestido azul de lana y tuvieron una humilde ceremonia de bodas.
Explotó el amor en Boston
Un sobreviviente a los atentados que se vivieron en la Maratón de Boston, sufrió graves quemaduras y heridas que lo dejaron hospitalizado por algunos meses, sin pensar que ahí sería donde encontraría el amor. Y es que cuando se encontraba postrado en una cama, su enfermera lo trató tan bien que decidió casarse con ella. James Costello y Krista D’Agostino están a punto de unirse por siempre.
¿Y su historia de amor en su boda es para contarse? Sin lugar a dudas nada ni nadie detuvo a estos hombres y mujeres que ahora son felices.