Aunque por ahí andan diciendo que “leer por placer es la consumación del capitalismo”, el Fondo de Cultura Económica (FCE) a lo suyo: a promover la lectura, ahora lanzando una colección de libros en el marco de la conmemoración de la fundación de Tenochtitlan y los 500 años de resistencia indígena.
Durante la mañanera de ayer, 25 de agosto, el titular del FCE, Paco Ignacio Taibo II, presentó la colección “21 para el 21”, la cual –como su nombre lo indica– consta de 21 títulos que tienen como objetivo fomentar la lectura entre los jóvenes, para ello los libros se distribuirán a bajo precio y, algunos, de manera gratuita.
“La colección ’21 para el 21’ nació hace unos meses dentro de la estrategia ‘Una República de Lectores’”, explicó el director de la FCE. Cada uno de los 21 títulos contará con un tiraje de 100 mil ejemplares. Este proyecto, entre costos de impresión, derechos de autor y un “microcosto” de distribución, tuvo un costo total de 45 millones de pesos… los cuales fueron patrocinados por el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado.
Respecto a los títulos, Paco Ignacio Taibo II señaló que estuvo dura la situación, ya que se tenían contemplados miles de obras y, obviamente, tuvo que hacerse una depuración. Pero, en sí, los títulos escogidos abarcan ensayo, crónica y novelas, desde la época post independencia hasta mediados del siglo XX.
Algunos títulos son La revolución de Independencia de Luis Villoro, Canek de Ermilo Abreu, Balún Canán de Rosario Castellanos, Tomóchic de Heriberto Frías, Antología de Poesía Mexicana del Siglo XIX, Y Matarazo no llamó… de Elena Garro, Tiempo de ladrones de Emilio Carballido, Los de debajo de Mariano Azuela, El laberinto de la soledad de Octavio Paz, entre otros.
“En algunos casos algunos libros que nos interesaban, o las agencias literarias o los herederos no estaban a favor de que sus autores tuvieran una distribución gratuita (…) el hecho es que fue depurándose una lista a partir de lo que había en el FCE”.
Si están interesados en adquirir la colección, igual y no se les hace… ya que por el bajo costo y por el objetivo de “21 para el 21”, la distribución de los libros se privilegiará entre maestros de secundaria jubilados, jóvenes becarios, programas piloto de fomento a la lectura, bibliotecas de las normales, universidades rurales, centros de secundaria, entre otros.