Nuestros padres nos enseñan a andar en bicicleta o patines, juegan futbol o muñecas con tal de hacernos pasar un momento agradable. Todos creemos que el nuestro es el mejor, pero alrededor del mundo se han vuelto famosos algunos hombres que hacen lo imposible por sus hijos.
Despertarse temprano en domingo para jugar Nintendo, llevarnos a la escuela a pesar de las inclemencias que se puedan suscitar y hasta sacar su lado artístico, son cosas que algunos papás han hecho durante su vida y se han contado en la red.
James tiene 3 años de edad pero ya sabe usar espadas láser, cruzar caminos con lava, explotar cosas, conducir naves espaciales, entre otros talentos de un superhéroe; todo esto es gracias a Daniel Hashimoto, su padre, quien es animador de Dreamworks y usa sus videos caseros para hacer realidad el mundo imaginario de James.
Yu Xukang, como todo buen padre lleva a su hijo a la escuela situada a 28 kilómetros de su hogar, la diferencia es que no usa automóvil, ni bicicleta sino su espalda. El camino es de aproximadamente dos horas y el hombre se gastó durante seis meses tres pares de zapatos, pero nada la importa más que ver a su hijo crecer y educarse.
Digno de una película de Hollywood, hace un año vimos como en un campo de beisbol se daba reencuentro entre una niña y su padre que había ido a la guerra en Afganistán y que por más de un año no lo veía y no sabía absolutamente nada de él. Posiblemente esta historia no sea como las anteriores, pero para esta jovencita fue un sueño realidad.
Mike Mika, un padre que pasa horas junto a su hija de tres años jugando clásicos de maquinitas, decidió hacer un esfuerzo muy especial por su pequeño retoño geek. Donkey Kong era su juego favorito, pero no era fan de Mario, por lo que el padre hackeó el juego para que la jugadora pudiera elegir a Pauline, tal y como lo hace con la princesa Peach en Super Mario Bros. 2.
Dave Engledow es fotógrafo de 43 años que desde el nacimiento de su hija se ha dado a la tarea de crear un álbum fotográfico, pero no del bautizo o aparición de Alice Bee en una pastorela, sino de lo que se hace en la vida diaria, pero con un toque de sátira con el que se busca que el mundo mire lo que “podría” pasar en la vida diaria de esta bebé.
¡FELIZ DÍA A TODOS LOS PAPÁS DEL MUNDO!