¿Le cayó el quitarrisas a Jair Bolsonaro? El pasado 20 de octubre la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) del Senado de Brasil presentó un informe bastante rudo en el que acusa al presidente de al menos 10 delitos relacionados con el manejo de la pandemia de COVID-19. Y qué creen, el Senado ya le dio luz verde.
Si pasa, también la Cámara de Diputados, el informe llegaría a la Fiscalía brasileña que tendrá que ponerse las pilas… aunque esto está medio difícil porque allá en Brasil dicen que el fiscal general Augusto Aras es palero de Jair Bolsonaro.
Pero bueno, ya bajo la mirada de la población y medios, la Fiscalía de Brasil tendría chance de pensar —durante 30 días— si presenta denuncias en contra del presidente con todas las de la ley.
10 delitos que persiguen a Jair Bolsonaro, presidente de Brasil
Lo que encontró este informe es que Jair Bolsonaro dejó que la pandemia de COVID-19 cobrara la vida de más de 600 mil personas, sin intervenir con una estrategia basada en la ciencia y poniendo por delante la reactivación de la economía.
En este reporte —de más de mil páginas— la CPI acusó también a cuatro ministros y más de 60 personas por el mismo tema: el mal manejo de la pandemia.
¿Y Jair Bolsonaro?
Va la lista de delitos que lo tienen contra la lona mediática en Brasil:
- Crímenes contra la humanidad.
- Prevaricación —algo así como el incumplimiento de los deberes de un funcionario al dictar resoluciones arbitrarias, contrarias a la ley.
- Falsificación de documentos públicos.
- Uso irregular de recursos (dinero) público.
- Epidemia con resultado de muerte.
- Violación de las medidas sanitarias.
- Charlatanería médica.
- Incitación al odio.
- Violaciones a los derechos sociales.
- E incompatibilidad con la dignidad y honor del cargo público.
De acuerdo con CNN, la familia de Bolsonaro está en la lista de las personas acusadas: Eduardo, Carlos y Flávio. Fuera de las redes familiares andan los exministros de Salud que le renunciaron al presidente (Luiz Henrique Mandetta, Nelson Teich y Eduardo Pazuello), el actual ministro de Salud Marcelo Queiroga, Walter Braga Netto (ministro de defensa) y varios legisladores, empresarios y hasta blogueros.
El informe ha sido un trancazo mediático, pero ahora falta ver si procede contra Jair Bolsonaro, que igual tiene gente que lo apoya en el Congreso y la Fiscalía.
Tratamientos fake y retrasos en la compra de vacunas
¿Se acuerdan de la hidroxicloroquina? Pues bien, Bolsonaro es acusado por pasarse de lanza y recomendar este producto al igual que el tratamiento con ivermectina para pacientes contra COVID-19 porque son ineficaces.
Además, el conservador también es acusado de retrasar la llegada de vacunas de Pfizer-BioNTech, preferir una vacuna aún no aprobada en India y… después cancelar el pedido por sospechas de soborno. Chale.
Jair Bolsonaro tuvo que comer en la calle por no tener vacuna contra COVID-19
**Con información de CNN y The New York Times.