La historia de Lalo López, su lucha contra el cáncer y el Pandatón 2015

“No puedes elegir las broncas que te tocan en la vida, pero siempre podrás elegir cómo las vas a enfrentar”.

Hace unos días tuvimos la oportunidad de conocer a Eduardo López Caturegli, quien creó y organiza el Pandatón 2015, que es un evento para ayudar a personas que padecen cáncer, ya sea corriendo, aportando dinero o su tiempo. Sin saberlo, estábamos frente a un ejemplo de lucha y un hombre ejemplar en toda la extensión de la palabra.

Por eso escribimos esta nota, no sólo porque consideramos que es importante difundir el Pandatón que se llevará a cabo el próximo domingo, para que se sume la mayor cantidad posible de gente, sino también porque la historia de Eduardo nos conmovió y nos contagió con su particular forma de ver la vida.

El día que todo cambió

El 18 de junio del 2013, Lalo fue diagnosticado con cáncer de colon con metástasis en el hígado en estadio 4. Ante lo avanzado de la enfermedad el pronóstico no era nada alentador. Cualquiera se derrumbaría ante una noticia así, sin embargo, y por contradictorio que resulte, a Lalo este padecimiento le trajo varias cosas positivas, y en lugar de deprimirse y darse por vencido, decidió enfocar el problema de otra forma.

Lalo decidió ver esta mala noticia como una oportunidad de aprender.

“Lo que le prometí a mi familia en ese momento fue ‘Miren, yo no sé si me voy a ir por esto, pero si es así, a partir de ahora ustedes van a conocer a la mejor versión de mí’. En lugar de que sea el principio del fin, decidí que fuera como una etapa de crecimiento”.

El blog

Además de un cambio de mentalidad, Lalo tuvo la fortuna de contar con muchas herramientas para hacerle frente al cáncer, como la educación que recibió, los recursos médicos que le brinda el seguro y le permitieron ir a buenos hospitales y tratarse con médicos competentes. Además de un grupo de amigos muy fuerte y una familia unida.

“Cuándo juntas todas estas herramientas, algo que sonaba como ‘muy imposible’ deja de serlo tanto. Empezamos a tener muy buenos resultados con los tratamientos, y claro, le echamos muchísimas ganas”.

Gracias a esto, Lalo ha podido seguir su lucha. En un principio el pronóstico de vida era de unos cuantos meses, y ahora lleva dos años y contando.

Esta experiencia de vida no se quedó únicamente entre Lalo y su círculo más cercano, sino que además decidió compartir sus experiencias por medio de Diario de un guerrero, un blog que comenzó a ser muy leído y compartido por personas que atravesaban por problemas similares, y por gente sana que encontraba motivantes sus textos. Así Lalo descubrió que todos tienen la capacidad de ayudar y generar una inercia positiva, simplemente cuando te decides a hacer algo.

“Todos dudamos entre hacer y no hacer, y muchas veces nos gana el no hacer. No te comprometes, no haces. Pero cuando decides hacer algo, por chiquito que sea, genera un resultado que detona una reacción en cadena. El blog me dio la pauta y a partir de ahí dije ‘oye, qué pasa si hacemos algo un poquito más grande, un poquito más tangible y sólido’, que no fueran nada más palabras sino que hubiera ayuda en los hechos”.

Así surgió la fundación Iniciativa Panda.

¿Por qué un Panda?

Seguramente ustedes también se están preguntando por qué darle el nombre de “Panda” a todo esto. La respuesta de Lalo nos pareció genial:

“El nombre tiene su origen en una experiencia personal. Cuando estaba escribiendo el blog tenía que nombrar a mi lucha contra el cáncer de alguna manera. Al blog lo llamé “Diario de un Guerrero”, pues estás con ese mood de ‘voy a vencer al cáncer, el cáncer es el enemigo’. En este tono de la lucha busqué un nombre, ya ves que los gringos lo hacen con todo, como la Operación Tormenta del Desierto. Pero todos los nombres que se me ocurrían eran súper cursis como ‘Operación Sanación Total’ u ‘Operación Recuperación’. Todos tenían que ver con la sanación y eran de súper hueva, como de libro de auto ayuda.

Luego me acordé de una anécdota: Mi esposa una vez se puso a clasificar a la gente por el animal al que se parecen. Ella decía ‘Mira, ese cuate parece águila, ese parece ratón, este parece perro”. De idiota se me ocurrió preguntarle ‘¿Y yo qué soy?’. Ya sabes, esperando la respuesta de ‘Tú eres un tigre’ o algo así. Y que me dice que soy un panda. ¡Cómo que un panda, si es el animal menos sexy, el más inofensivo y el menos respetable del universo!. Le pregunté si era porque estaba gordo -estaba yo más gordo- y si una vez que adelgazara dejaría de ser panda. Me dijo ‘no, tú no eres panda por gordo. Si adelgazas eres un panda flaco nada más, pero el pandismo es irreversible’. El pandismo consiste en que son cabezas grandes, extremidades cortas y peludos.

Entonces, cuando estaba bautizando la fundación me acordé de que soy un Panda y decidí llamarla ‘Iniciativa Panda’, y tenía su onda porque era la operación de “salvemos al Panda”, y el que estaba en peligro de extinción era yo”.

Darle ese nombre fue muy afortunado porque los pandas generan una gran empatía y transmite el mensaje que Lalo quería dar sobre disfrutar y divertirte a pesar de las adversidades pues de todas formas se puede vivir de una forma increíble.

“Hay una realidad inobjetable y es que a todos nos toca luchar por algo o contra algo, a mí me tocó esto, a ti te tocan otras cosas. Todos tenemos algo que enfrentar y eso no implica que tenga que ser trágico, pues lo que realmente hace las cosas trágicas no es el hecho en sí, sino la dimensión que le demos nosotros. He logrado que esta enfermedad haya tenido de todo, menos drama, porque finalmente entiendo que todos nos vamos a morir de algo. Si yo muero de esto, pues me moriré de esto, o me puede atropellar un microbus saliendo de aquí o caerme un pelado de un andamio, o me da un infarto en la oficina.

El mensaje aquí es que no nos preocupemos por tratar de alargar la vida, sino que estemos más ocupados por ensancharla y llenarla de cosas que valgan la pena, porque algo que aprendí con toda esta enfermedad es que a final de cuentas no importa cuanto vivas, nadie te va a recordar por eso, sino por lo que dejaste mientras estuviste aquí. La gran ventaja que tienen estas enfermedades es que te recuerdan que puedes morir y te ayudan a priorizar el tiempo, a hacer cosas que siempre quisiste hacer pero que dejaste para después. En esos momentos dices ‘el después quién sabe si llegue, entonces tengo que empezar ahora’ y eso fue lo que hice”.

La idea del Pandatón

Una vez que se creó Iniciativa Panda, se pensó en realizar un evento para obtener fondos y poder ayudar a los demás. De esta forma nació la idea del Pandatón.

“Al momento del diagnóstico no sabía si iba a seguir aquí en este tiempo, entonces quería hacer algo que fuera muy tangible, algo que fuera muy claro, tuviera una fecha y ciertas cosas que hacer, un principio y un fin. Y yo estaba seguro que por lo menos para acabar el Pandatón yo aún estaría por aquí. Dije, ‘vamos a arrancar con eso y si la salud se mejora, luego hacemos más cosas'”.

Lo primero era hacer este evento diferente. Aprovechando el auge que hay por las carreras, decidieron hacer una, pero dándole un nuevo giro:

“Carreras hay millones y la verdad hay unas muy buenas, con mucha convocatoria y tradición. Ahí fue donde pensamos en hacer un formato que fuera distinto y decidimos que fuera una carrera no por distancia sino por tiempo. Yo le llamo el ‘Formato Le Mans’, porque es como las 24 horas de Le Mans, es por tiempo y es ‘cuántas vueltas puedes dar en ese tiempo’. Lo mismo decidimos hacerlo aquí, le damos dos horas y media al corredor, y el corredor decide y se compromete a correr equis cantidad de kilómetros en ese tiempo.

Me preguntan mucho ‘oye, ¿tengo que correr las dos horas y media?’ Pues no, ese es el tiempo que tienes disponible. Tú decídes si corres media hora, una hora, hora y media, etc. Habrá gente que corra 30 kilómetros, otras 5, otros como yo se arrastrarán. El chiste es que el corredor se convierta en una causa ambulante, en una causa con patas. Ellos se comprometen con la sociedad diciendo ‘voy a correr tanto’. La idea es que sea un esfuerzo que represente un sacrificio, y es una manera de involucrarte con la causa de una manera personal y profunda”.

Con el Pandatón se cambia esa idea de “apoyar a los demás sacando lo que nos sobra de la cartera”, pues aunque eso ayuda no le da al donador la satisfacción de alguien que se involucra:

“Cuando tú dices, oye, voy a correr, voy a sudar, voy a sacrificarme, realmente te estás involucrando de manera emocional y personal. Además, en la dinámica lo que le decimos al corredor es ‘oye, además de que vas a correr, debes conseguir a tus padrinos’.

¿Quienes son los padrinos? Son tus amigos, tus parientes, tus compañeros de trabajo, que son los que convierten tu esfuerzo en tratamientos, operaciones y medicinas, comprándote tus kilómetros.”

De esta forma, quienes dicen “voy a correr 10 kilómetros”, buscarán personas que les paguen esos diez kilómetros, completando el binomio entre quienes corren y quienes ponen el dinero por el esfuerzo. Aquí se explica mejor la dinámica del evento, los costos y las dos asociaciones a las que se apoyará con este evento:

Como vimos en el video, hoy viernes 12 de junio hasta las 12 de la noche es la fecha límite para inscribirte en el sitio web del Pandatón, así que date prisa pues aún quedan unas horas. También puedes inscribirte en las tiendas Innovasport, Sportia y en AS Deportes.com. Ojo, los acompañantes NO pagan. Si quedan lugares, quizá mañana podrás inscribirte en la entrega de kits, pero te pedimos no confiarte. Para obtener más información del evento en el sitio oficial del Pandatón.

Cundo Lalo habla de este evento le brillan los ojos, y eso nos contagia a todos.

“Descubres que la única forma de sentirte lleno, feliz y sin ningún tipo de vacío es cuando haces las cosas pensando en los demás. Suena como cliché pero es la realidad. Yo lo he vivido, he trabajado con este proyecto más que nunca. No ganó nada porque todo es a base de donación, incluso estoy invirtiendo dinero para poder organizar esto y lo único que espero es recuperarlo, pero finalmente nunca había estado tan satisfecho, es decir, por ver la energía positiva que está generando el evento que va a ser divertidísimo, porque no sólo es la carrera, después de ella hay varias actividades increíbles para los corredores y para quienes vayan a echar porras”.