En diciembre del 2015, Will Smith encarnó al Dr. Bennet Omalu en la película Concussion. Omalu, fue el primer doctor en descubrir y publicar los daños cerebrales sufridos por algunos jugadores de fútbol americano, debido a los contantes golpes que reciben en la cabeza.
Dos años después, la Asociación Médica de los Estados Unidos, ha publicado el estudio más extenso y completo sobre la encefalopatía traumática crónica, y su relación con el fútbol americano profesional y los resultados son alarmantes.
De 111 cerebros estudiados que pertenecieron a jugadores de fútbol americano, 110 registraron daños por encefalopatía traumática crónica.
Cabe mencionar, que este síndrome, solo se puede detectar en personas ya muertas, por lo que es imposible saber si un jugador en activo puede padecer algún tipo de trastorno. Sin embargo, los síntomas son claros, demencia, fuertes dolores de cabeza, depresiones y un volátil estado de ánimo.
De acuerdo a este estudio, los linieros son los que llevan la mayor parte, sometiéndose a más de 60 golpes de alto impacto por partido, los cuales podrían ser equivalentes a chocar la cabeza contra un muro a una velocidad de 30 kilómetros por hora.
El daño también es notable entre los corredores, esquineros, linebackers, receptores y alas cerrada, dejando a los quarterbacks y los bateadores como los menos propensos a sufrir este tipo de daño.
Sin embargo, la conclusión es clara: mientras más años pasa una persona, jugando futbol americano, más probabilidades tiene de sufrir una lesión cerebral.
El estudio parece ser un balde de agua fría para la NFL, que durante años, trató de minimizar el problema. Sin embargo, diversos estudios médicos han confirmado que el constante golpeteo que provoca el fútbol americano a nivel infantil, colegial, y profesional causa un daño permanente en el cerebro de las personas que practican este deporte.
Algunos, como Ken Stabler o Junior Seau han sido inmortalizados en el Salón de la Fama, otros, nunca sabremos que fue lo que pasó….
Aún hay mucho que aprender sobre la encefalopatía traumática crónica ¿Quiénes lo desarrollan, quiénes no, qué lo causa, la cantidad de golpes o el impacto de los mismos? ¿Es posible detener la degeneración una vez que se detecta?
El problema existe… y la NFL tiene que hacer algo, por amor a sus jugadores, por amor a su afición y por amor al fútbol americano.